Fritata de gruyer y tubérculos

PREPARACIÓN

1. Es importante tener una buena variedad de tubérculos: zanahorias, batatas, chirivías, papas, y también algunas cebollas y un par de dientes de ajo.

2. Se pueden usar tubérculos asados sobrantes o cocinarlos especialmente. Para prepararlos para este plato, precalentar el horno a 180°C. Lavar los tubérculos muy bien pero dejarles la cáscara y cortarlos en cubos de aproximadamente 1,5 cm. Pelar y cortar las cebollas en cuatro pedazos y aplastar los dientes de ajo sobre una tabla de picar con un cuchillo.

3. Cubrir una asadera con papel de horno para evitar restregar la fuente después y ubicar los tubérculos con un buen chorro de aceite de oliva común. Mezclarlos un poco con las manos y condimentar con sal, pimienta y tal vez con algunas hierbas, como romero, cocinar en el horno durante 30 a 45 minutos.

4. Es preferible no utilizar aceite de oliva extra virgen para cocinar al horno o para freír ya que su punto de humeo es más bajo que el del aceite común, por lo tanto el sabor se vuelve rancio y además emite radicales libres perjudiciales con mayor rapidez que otros aceites. Se recomienda usar aceite de oliva común o aceite de canola cuyos puntos de humeo son de alrededor de 200°C.

5. Si se utilizan tubérculos sobrantes, cortarlos en cubos de 1,5 cm porque si son muy grandes, la mezcla con los huevos tardará más en cuajar. Pelar los dientes de ajo y aplastarlos. Calentar el aceite en una sartén apta para horno y de tamaño suficiente para que quepan todos los ingredientes.

6. Batir los huevos, la leche, el perejil muy bien picado y la pimienta en un recipiente grande y con cuidado mezclar los tubérculos. Verter la mezcla en la sartén, revolviendo en el centro durante los primeros minutos para ayudar a que el huevo se cocine más rápidamente. Cocinar a fuego medio durante 10 a 15 minutos. Luego apagar el fuego y espolvorear el queso antes de llevarlo al horno por otros 15 a 20 minutos, hasta que esté a gusto. Servir con una ensalada verde y pan integral crujiente.

VARIANTES

Se pueden agregar hojas de espinaca tiernas para darle color y sabor al plato.
Se puede utilizar albahaca en lugar de perejil y unos piñones o una cucharada de pesto, para que tenga un sabor más italiano. Servir con un pan ciabatta y una ensalada verde con aceitunas y tomates secos.
También se puede experimentar con otras clases de queso, como un queso de cabra cremoso cortado en pedacitos y puesto por encima de la preparación antes de llevarla al horno.